Las multas de tráfico: 18.400 euros cada día – 3.3.22
photo_camera Una de las 11 cabinas de radar en el casco urbano vigués.
- José Teo Andrés - ATLANTICO - 02/mar./22
El pasado año, la recaudación por la Administración local alcanzó los 6,7 millones entre sanciones, recargos e intereses
El Concello de Vigo recaudó de media el pasado año 18.393 euros al día en la suma de las multas y los recargos e intereses de demora por dichas sanciones, según se desprende de los datos ya oficiales de la liquidación del presupuesto de ingresos. En concreto, aparecen 6,713 millones en el apartado de recaudación neta, es decir el importe de los cobros que se han realizado sobre los derechos reconocidos en el ejercicio, minorados por el importe de las devoluciones de ingresos pagadas en el ejercicio. Es, por tanto, lo que el ayuntamiento ha podido realmente ingresar. Las previsiones iniciales formuladas en el documento presupuestario partían de recaudar 4,17 millones en multas y 1,7 millones en recargos por no haber cumplido a tiempo con la sanción administrativa, así como en otros 600.000 euros en intereses de demoras. La realidad no ha estado muy lejos de dichas expectativas, aunque el resultado final ha sido incluso superior. En concreto, en el apartado de multas el Concello sumó algo más de 4 millones (unos 165.000 euros menos), pero a cambio subió a dos millones los recargos (300.000 más) y a 672.157 los intereses (72.000 euros más). Por tanto, el superávit por este capítulo asciende a algo más de 200.000 euros sobre lo incluido en el presupuesto del Concello de Vigo. Además, se trata de una cifra que no ha dejado de crecer a lo largo de los años, con la caída de 2020 donde la circulación se redujo al mínimo durante varios meses por el confinamiento obligado. Pero en 2021, pese a la pandemia, continuaron engrosando los ingresos vía tráfico en la hacienda municipal.
Las perspectivas a corto plazo continúan siendo de incremento con el mayor despliegue de puntos de control fijos. Como informó el propio Concello, desde febrero hay 11 en total, tres más que hasta entonces al incluir avenida de Madrid, Castrelos y otro en Clara Campoamor. La medida se considera disuasoria para reducir velocidad y accidentes. El departamento de Tráfico ya redistribuyó los radares fijos en las once cabinas por toda la ciudad: aunque solo tres de los 11 aparatos estarán operativos, el conductor no sabrá cuáles serán, ya que los cinemómetros van a ser movidos de uno a otro punto. Todos los lugares elegidos cuentan con las mayores intensidades medias diarias de circulación, como los tres colocados en el túnel de las Avenidas, y controlan en ambos sentidos.