Más de 200 aldeas están en riesgo de desaparecer
Ourol y Viveiro son los que tienen más núcleos deshabitados
j.a. t.t.
viveiro / la voz 18/02/2019 11:53 h
A Mariña no deja de perder población. La comarca, que hace poco más de veinte años rondaba los 77.000 habitantes, se encuentra ahora en poco más de 71.000. Otra tendencia, también muy preocupante, es que se consuma la desaparición de pequeños núcleos y aldeas, donde sectores como la agricultura y la ganadería no logran alcanzar el prestigio que deberían tener como eje fundamental de la economía de cualquier pueblo. Las políticas que se adoptan desde algunos ayuntamientos para fomentar la natalidad están teniendo un efecto muy limitado. Como el impacto, más mediático y pintoresco que real, de la compra de aldeas por parte de inversores extranjeros.
El panorama en Galicia
Según los datos del Nomenclátor del Instituto Nacional de Estadística, en la comunidad gallega existen unos 3.677 núcleos de población vacíos. Esto supone más del doble de lo que había hace cinco años, cuando se contabilizaron 1.561 aldeas y pequeñas agrupaciones de casas en esa situación, unas 2.000 menos que ahora.
Las cifras sitúan la despoblación en porcentajes importantes, ya que roza el 10 %: en Galicia hay 30.769 lugares diferenciados -desde casas aisladas a barrios de ciudades-, con 3.677 aldeas vacías.
En cuanto a la provincia de Lugo, las casas deshabitadas son una epidemia. Hay un dato que ilustra la situación: según la información del Instituto Nacional de Estadística (INE), no hay ningún municipio de Lugo en el que todos sus núcleos estén habitados. Mariña ocupa un triste lugar de privilegio, ya que en Viveiro existen 84, en Ourol 106, en Muras 108, en Vilalba 62, en A Fonsagrada 52, en Friol 54 y en Palas de Rei 81. Pero en A Mariña, además del elevado número de aldeas sin habitar (una cifra muy elevada si se tiene en cuenta en cuenta el número total de habitantes) hay otras 200 en riesgo de desaparición, lo que significa que en cada una de ellas habita solo una o dos personas.
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Con mucha diferencia el concello que cuenta con más aldeas abandonadas es Ourol, con un total de 106. La mayoría de ellas se encuentra en el área limítrofe con Viveiro, ya que este municipio es el segundo de la lista con 84 núcleos despoblados. Entre estos dos concellos suman más núcleos sin habitantes que el resto de la comarca, de forma que la parte occidental se ve más afectada por la despoblación.
Esto se traduce en que la comarca sufre una mayor despoblación que el resto de la autonomía, una situación similar a la del conjunto de la provincia de Lugo, que tiene más de 600 localidades sin vecinos. Lugo presenta la peor situación con respecto a las cuatro provincias gallegas, un panorama muy preocupante.
Trabada
Frente a esa situación, hay concellos que están emprendiendo políticas activas para fomentar el asentamiento en el rural. Un caso paradigmático es el de Trabada, que por primera vez en décadas logró en 2018 ganar población.
O Vilar, en Ribadeo, perdió a su último habitante
El barrio de O Vilar, en la parroquia ribadense de Ove, es uno de los ejemplos de núcleos rurales que poco a poco han ido a perdiendo a todos sus habitantes. El último que residía en el lugar, de avanzada edad, ingresó en un geriátrico. O Vilar es una zona con unas vistas privilegiadas, relativamente próximo al casco urbano de Ribadeo, pero todas sus casas, poco a poco, han sido abandonadas. Mantener en buen estado las viviendas es clave para fomentar el alquiler como una de las vías para que los pueblos no desaparezcan. Un ejemplo lo encontramos también en Ribadeo, en Couxela, donde se han habitado muchas casas, en buena medida con familias jóvenes procedentes del municipio vecino de Vegadeo.
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